El espectáculo comenzaba con un video en le que Martin hablaba de su devoción por Dylan y Jeff Buckley, y después comenzaba al música con una fanfarria digna de la banda sonora de ET, y los acordes de “Hurts Like Heaven”, tema que abre el nuevo disco.
Todo le mundo antes y después del concierno se preguntaba lo mismo. ¿Son ya los Coldplay la banda mas grande del mundo?, o todavía deben esperar a que los señores de U2 les den permiso. La pregunta queda en el aire. Esta claro que los Coldplay quieren seguir la estela de la larga lista de superbandas inglesas los Beatles, Los Rolling, Los Kinks, Los Who, etc.
Desde luego su poder de convocatoria es muy alto y se demostró cuando las entradas para el concierto del Las Ventas se agotaron en pocos minutos.
Habrá que ver como funciona este nuevo disco, cuarto en su carrera. La canción de lanzamiento del disco “Every teardrop is a waterfall” es una canción banal y floja para una parte de la critica, sin embargo sus incondicionales la califican de irresistiblemente vitalista. Una vez escuchado el disco por primera vez queda claro que las intimistas canciones de los Coldplay han pasado a la historia y dan paso en este disco a canciones mas moviditas, mas enfocadas a funcionar bien en conciertos en vivo y provocar que la adrelanina colectiva se active.
Por cierto el estrambótico titulo no significa absolutamente nada, y dicen que se les ocurrió la ver los grafitis que adornan muchas ciudades del mundo.
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